El volcán Popocatépetl, ubicado en el centro de México, intensificó su actividad, provocando la caída de ceniza en poblaciones cercanas de los estados de Puebla y Morelos. Este incremento en la actividad se debió a 46 exhalaciones acompañadas de vapor de agua y gases, sumado a un tremor que se prolongó por más de tres horas.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) informó en su último reporte que estos tremores se traducen en movimientos sísmicos continuos, característicos de la actividad volcánica y relacionados con el paso de magma a grandes profundidades. El tremor suele preceder o acompañar a las erupciones y se vincula con el movimiento del magma dentro del volcán.
El informe detalla: “Se detectaron 46 exhalaciones, acompañadas de vapor de agua, gases volcánicos y ocasionalmente ceniza. Además, se registraron 190 minutos de tremor de alta frecuencia de media a baja amplitud, junto con una emisión de vapor, gas y ceniza que se desplazó hacia el oeste-suroeste».
A raíz de esta actividad, el Centro Nacional de Comunicación y Operación de Protección Civil (CENACOM) confirmó la caída de ceniza en el municipio de Ayala, Morelos y en localidades aledañas de Puebla.
El Cenapred recalca que esta actividad se enmarca dentro del Semáforo de Alerta Volcánica Amarillo Fase 2. Esto anticipa la continuación de actividad explosiva de escala baja a intermedia, posibles lluvias de ceniza en zonas cercanas y el riesgo de flujos piroclásticos y de lodo a corta distancia.
A lo largo del día, se ha registrado una emisión continua de vapor y gases en dirección oeste-suroeste.
Ante la caída de ceniza, el organismo, perteneciente a la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), aconseja a la población seguir medidas de seguridad como: usar cubrebocas o pañuelos para nariz y boca; enjuagar ojos y garganta con agua limpia; preferir lentes de armazón sobre los de contacto y mantenerse resguardados en interiores, cerrando o cubriendo ventanas.
Finalmente, el Cenapred enfatiza la importancia de no acercarse al cráter del volcán debido al riesgo latente de explosiones que arrojen fragmentos incandescentes. En caso de lluvias intensas, se recomienda alejarse de barrancas para evitar ser sorprendidos por flujos de lodo o escombros.
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