Redacción: Regina De Quevedo
Clara Brugada, la jefa de Gobierno informó que las palmeras serán reemplazadas por arboles cuyas raíces no dañen el pavimento y que contribuyan a embellecer la ciudad. A través de un comunicado, se dio a conocer que las palmeras se remplazaran por árboles nativos como duraznillo, tejocote o arrayán. La jefa de Gobierno mencionó lo siguiente “que, a diferencia de las palmeras, no afectan el pavimento con sus raíces y se convierten en un aporte directo al embellecimiento y resiliencia ambiental de la ciudad”.
Esta propuesta surge debido a la plaga de un hongo que afecta a unos 9,000 de 15,000 ejemplares que habitan en la ciudad, que las ha estado matando lentamente desde el 2011. De septiembre a diciembre de este año, se retirarán aproximadamente 1500 palmeras; las restantes, durante el sexenio actual.
Se decidió intervenir primero con 1500 palmeras, las cuales se mostraban afectadas con síntomas críticos que afectaban su vida, “lo que representa un riesgo para la salud de los ciudadanos” informó la Secretaría del Medio Ambiente (Sedena). De igual modo, los ciudadanos se han mostrado consternados sobre la muerte de las palmeras. A este esfuerzo se incorporará la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) en el que se conformarán cuadrillas que trabajen en vialidades y parques de alto tránsito.
En la década de 1940, durante el sexenio de Miguel Alemán, las palmeras llegaron a México. De acuerdo con una publicación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alemán solicitó que se realizara un diseño urbano de la Ciudad, inspirado tras un viaje laboral a Los Ángeles y fascinado por el paisaje tropical de Beverly Hills; gracias a eso decidió sumar estos ejemplares a su selección de plantas (phoenix canariensis), las cuales llegaron desde las Islas Canarias.