Actualidad

De «paraíso de la contaminación» a metrópolis sostenible: El milagro de Singapur en 60 años 

En sólo seis décadas, Singapur transformó su reputación de un «paraíso de la contaminación» a ser una de las ciudades más avanzadas, sostenibles y prósperas del mundo. Esta metamorfosis se atribuye en gran medida a la visión y estrategias de su primer líder, Lee Kuan Yew, y a las estrictas políticas gubernamentales centradas en la inclusión, la justicia y el desarrollo sustentable. 

Nacida de las cenizas de la guerra y atrapada en problemas de contaminación a mediados de la década de 1960, la ciudad-Estado, con un pasado marcado por ríos cenagosos y aguas negras sin tratar, emprendió un viaje de autodescubrimiento y transformación. Lee Kuan Yew, centró su visión en dos pilares: políticas incluyentes y justicia imparcial, priorizando la diversidad cultural, lingüística y religiosa, y un enfoque estricto contra la corrupción. Para fortalecer su posición en el mercado internacional, el país también priorizó la inversión en vivienda, educación, salud y desarrollo laboral. 

El medioambiente jugó un papel crucial en esta transformación. A lo largo de los años, proyectos como la limpieza del río Singapur y la reforestación urbana se convirtieron en símbolos del compromiso de Singapur con la sostenibilidad. Lee Kuan Yew consideraba que las plantas y la biodiversidad no solo embellecían la ciudad, sino que también brindaban bienestar mental a sus habitantes. 

Hoy, los emblemáticos árboles de acero de 50 metros de altura en los Jardines de la Bahía, que parecen salidos de una película de ciencia ficción, simbolizan la innovación y la fusión de tecnología y naturaleza en Singapur. Estas estructuras futuristas, junto con el famoso hotel Marina Bay Sands y un eficiente sistema de transporte público, evidencian la habilidad de Singapur para combinar desarrollo y sostenibilidad. 

Como resultado de estas estrategias y esfuerzos, Singapur se ha posicionado como la cuarta ciudad con el mayor Índice de Desempeño Ambiental en el mundo y la segunda nación más feliz de Asia, según la ONU. Además, ha sido reconocida como la ciudad más inteligente del mundo por el Smart Cities Index de Juniper Research. Con estos logros, Singapur sirve de inspiración para ciudades y naciones de todo el mundo, demostrando que es posible combinar desarrollo, prosperidad y sostenibilidad en armonía. 

¿Te gustó nuestra nota? ¡Contáctanos y deja tu comentario! AQUÍ

Conoce nuestra red ANCOP Network AQUÍ

EtiquetasContaminación