Econegocios

El cierre de centros de acopio de reciclaje en México: un desafío ambiental y comunitario 

Redactor: Daniel Lee

El manejo de un centro de acopio de reciclaje es una tarea que a menudo se enfrenta a desafíos considerables, y en algunos casos, la sostenibilidad a largo plazo se vuelve casi imposible. A pesar de los beneficios ambientales y sociales que ofrecen, la decisión de cerrar uno de estos centros, que no solo gestionan residuos sólidos urbanos sino que también crean comunidad y promueven la educación ambiental, es una tarea difícil. 

En julio de 2022, el equipo de Reciclub, un centro de acopio ubicado en la colonia Postal de la Ciudad de México, tomó la valiente decisión de cerrar sus puertas. Reciclub no solo operaba como centro de acopio, sino también gestionaba rutas de recolección en la comunidad. 

Sin embargo, el cierre de Reciclub no significó el fin de su compromiso con el medio ambiente y la educación. En lugar de desaparecer, el proyecto se transformó en nuevas ideas y actividades destinadas a impulsar la educación en gestión de residuos. 

Melissa García, creadora de Punto Orgánico, un proyecto que también tuvo que cerrar su centro de acopio en Querétaro, compartió su experiencia. La caída en los precios de venta de los residuos valorizables fue un factor determinante para el cierre de sus operaciones.  

Pero en lugar de renunciar al reciclaje, Melissa se alió con la Universidad Autónoma de Querétaro, donde imparte talleres de sustentabilidad y educación ambiental. Además, Punto Orgánico se enfoca en recuperar residuos en lugar de comprar materiales, lo que atrae a una variedad de participantes, desde el público en general hasta pequeñas empresas y personas que gestionan sus residuos desde casa. 

Operar un centro de acopio en la Ciudad de México implica una serie de trámites y regulaciones. Para obtener la autorización, las personas interesadas deben tramitar el Registro y autorización para el manejo integral de los residuos (RAMIR) ante la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema). Actualmente, según datos oficiales de Sedema, existen 147 centros de acopio en la ciudad, 25 están en proceso de renovación y 17 han cerrado definitivamente. 

Mantener un centro de acopio no es una tarea sencilla. Los operadores enfrentan fluctuaciones en los precios de los residuos sólidos urbanos y la competencia en el mercado. Melissa García explicó que los costos operativos, que incluyen rentas, nóminas y transporte, a menudo superan los ingresos generados por la venta de materiales reciclables. 

El cierre de centros de acopio tiene un impacto en la comunidad. Estos lugares son esenciales para valorizar y reciclar residuos, y su cierre puede dificultar que los ciudadanos con iniciativa para reciclar continúen con sus esfuerzos. En la Ciudad de México, se generan diariamente 12,355 toneladas de residuos sólidos urbanos, lo que destaca la importancia de los centros de acopio en la gestión de estos desechos. 

Para quienes han incorporado el reciclaje como un estilo de vida, la solución ante el cierre de un centro de acopio es buscar alternativas cercanas. Cada alcaldía en la ciudad tiene su propia dinámica de reciclaje, por lo que es importante que los ciudadanos se informen sobre las opciones disponibles en su área. 

Alejandra Valdez, cofundadora de Ecolana, una organización dedicada a campañas de reciclaje y educación ambiental en México, enfatiza la importancia de enseñar a las personas cómo reciclar y homologar las prácticas de reciclaje en diferentes áreas de la ciudad. Ecolana ofrece un mapa en línea que permite a los ciudadanos encontrar centros de acopio cercanos y aprender sobre las dinámicas de reciclaje en su región. 

El cierre de un centro de acopio puede ser un desafío, pero con información y cooperación, los ciudadanos pueden seguir contribuyendo a la gestión responsable de los residuos sólidos urbanos y la protección del medio ambiente. 

¿Te gustó nuestra nota? ¡Contáctanos y deja tu comentario! AQUÍ

Conoce nuestra red ANCOP Network AQUÍ

Etiquetasbasura reciclaje