Redacción: Inés Arroyo
El Gobierno acudió al Congreso para explicar por qué las empresas chinas BYD y Tsingshan detuvieron sus proyectos de inversión vinculados al litio. La sesión se realizó en la Comisión de Minería y Energía de la Cámara de Diputados, con la presencia de los ministros de Economía, Medio Ambiente, Minería (s) y el vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente.
Según Corfo, Tsingshan quedó fuera del proceso porque no cumplió con un requisito legal: establecer una unidad jurídica en Chile. Esto impidió que avanzara su iniciativa. No fue una decisión política ni una medida del Ejecutivo, sino un incumplimiento de la empresa.
En el caso de BYD, la situación es diferente. La compañía aún mantiene su calidad de productor especializado. Aunque renunció a un terreno en Antofagasta en febrero, no ha presentado una notificación formal de retiro. Corfo asegura que el vínculo con BYD sigue activo, y no se ha cerrado la posibilidad de que retome el proyecto.
“Hasta el día de hoy, ellos no se han desistido y nosotros no nos hemos desistido de BYD”, afirmó Benavente.
También se aclaró que el Ministerio del Medio Ambiente no intervino en ninguna de las decisiones de las empresas. Las autoridades aseguraron que no hubo obstáculos ambientales ni exigencias nuevas que provocaran la salida o detención de los proyectos.
Con estas explicaciones, el Gobierno busca despejar dudas sobre la Estrategia Nacional del Litio y confirmar que Chile sigue abierto a recibir inversión extranjera bajo reglas claras y exigencias conocidas.