Redacción Melissa Paniagua
Según un informe de la Unesco, la Inteligencia Artificial Generativa (IAG) representa una amenaza ambiental cada vez mayor, ya que estos sistemas requieren un consumo creciente de energía y agua potable para su funcionamiento.
El informe “Más inteligente, más pequeña, más fuerte: IA generativa eficiente en el uso de recursos y el futuro de la transformación digital”, publicado el pasado martes, hace un llamado urgente a la industria tecnológica para que orienten sus investigaciones hacia modelos de IA que requieran menos recursos y sean más accesibles.
Según el informe, herramientas como ChatGPT podrían estar utilizando más de 300 GWh al año, lo que equivaldría al consumo de electricidad de más de tres millones de personas en países como Etiopía. Además, el uso de agua potable en los centros de datos está aumentando, una tendencia que las grandes empresas tecnológicas podría triplicar para el año 2027.
La Unesco pide a las compañías del sector tecnológico que sean más transparentes sobre el impacto ambiental de sus avances en la IA, ya que en el informe también se advierte los riesgos que representa la IAG en términos de equidad digital. Los modelos más grandes no solo exigen más recursos, sino que también necesitan infraestructuras costosas, lo que los convierte en herramientas inaccesibles para comunidades con recursos limitados.
¿Te gustó nuestra nota? ¡Contáctanos y deja tu comentario! AQUÍ
Conoce nuestra red ANCOP Network AQUÍ