“defensas, falsas barreras se alzan rápido para encubrir los sentidos
cuando te dicen no eres nada salvo tu máscara actúas todo el tiempo
incluso cuando interpretas tu propio papel”.
Poema Locura, de Bob Dylan
Ya es costumbre en los años que lleva la Cultura Impar que otorgue espacio a los
ojos de quienes saben, y mostrar lo que muchos lectores nos dicen sobre los
escritos. Principalmente positivos, rara vez negativos o groseros (si se vale el
término) hacia quien escribe. Todas las veces, alimentando la mente para dar
mejores mensajes.
Solo un comentario breve sobre los clásicos de la comunicación que explican cómo
la información de regreso es necesaria e indica que los mensajes llegan -resuelvan
o no sus intenciones-. Es saber si el destinatario captó en los mismos términos que
se escribe. Permite por tanto, evaluar la efectividad de la comunicación, y la Cultura
Impar se congratula al ver que sí, hay mensajes de regreso.
Solo por dar un ejemplo, desde Tijuana han puesto: “Excelente escrito, triste
realidad; ¿qué propones para salir de los problemas nacionales?
Respondo: Trabajo en ello, gracias Anita, por leerme tanto.
Apenas hace unas semanas, un gran biker mexiquense, abogado de profesión, me
dio una buna lección al comentar respecto de las mentiras ya tan comunes dentro
de la política nacional, sin nada que ver los colores para los que se sirve el
funcionario.
Atinadamente hace ver que falta un tanto más de investigación a la hora de escribir.
No calificar o descalificar sin datos. Y dice con razón: “Creo que el análisis debe
versar en salario familiar de 3 mil pesos. ¿Para que le alcanza a una familia? Y ver
así las propuestas de las dos partes. De la gente y la oficial.
“Ponle comparativos que tu lector no solo vea letras de ideas sino cifras fáciles de
digerir por una comparación con lo cotidiano.
¿Cuánto cuesta Rosalía en el zócalo y a cuanto equivale de inversión en el Metro
al hacer los baños públicos más baratos? Antes eran gratis y alguien decidió
enriquecerse con las necesidades de la gente”.
Y continúa: “Los estacionamientos en centros comerciales deben ser gratis. ¿Quién
decidió cobrarlos a cambio de dar licencias de construcción?
Eso quiere la gente leer. Hay ciclovías en Toluca y ¿nadie las usa?”.
Hasta ahí uno de los comentarios. Y habremos de investigar para responder.
Y otro amable lector de años, que siempre comenta para enriquecer las ideas: “En
México, cierto, hay muchas universidades que imparten carreras con estudios de
nivel superior. Hay oficiales y mucho descontrol con las patito, son falsarias como
la canción de Agustín Lara.
“Pero entre unas y otras, podemos afirmar que buen número de ellas no están
ligadas, imbricadas con los sistemas laborales y de producción del país.
“Los empresarios y el gobierno federal, no estudian, no evalúan, no planifican, ni
armonizan los planes y programas de estudio de las universidades, con el potencial
productivo y de bienes y servicios en todo el país. Ni les interesa tanto.
“Cual más funda una escuela o universidad de todo tipo. Y, trabajan sin registro y
evaluación oficial de la SEP, y otras, lo tienen, pero los estudios que imparten, sin
maestros evaluados, están disociados, desencadenados con la realidad económica,
social y cultural del país y lo que es peor, con carreras del futuro (ya de hoy), como
la programación, la energía y la tecnología.
Y, todavía menos, con la nanotecnología…”
Millones de gracias al amigo Rodolfo por sus comentarios. Y miren que él sabe de
política.
En fin, tan solo en tres semanas, fueron poco más de dos centenas de mensajes en
respuesta. Absolutamente todos, se agradecen.
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