En el corazón de La Magdalena Contreras, en la Ciudad de México, un proyecto ecoturístico está tomando forma con la finalidad de preservar el medio ambiente y fomentar la conexión con la naturaleza. La cooperativa Kalixtlauatl El Paraíso, fundada por la familia Fuentes Soto, se ha convertido en un refugio para aquellos que buscan disfrutar del aire libre mientras contribuyen a la conservación del ecosistema local.
El origen del proyecto se remonta a la dedicación de Feliciano Soto, bisabuelo de Eduardo Antonio Fuentes, quien durante décadas se dedicó a cuidar y proteger las cuatro hectáreas de bosque que hoy conforman El Paraíso. La familia, ahora en su cuarta generación, ha continuado con este legado, transformando el área en un destino ecoturístico.
La cooperativa ofrece una variedad de actividades para los visitantes, incluyendo campismo, senderismo y rapel. Estas actividades no solo promueven la conexión con la naturaleza, sino que también educan a los visitantes sobre la importancia de la conservación ambiental. Eduardo Antonio, estudiante de ingeniería civil, destaca que el proyecto también incluye la restauración de un tanque de truchas, siguiendo los pasos de su bisabuelo.
La cooperativa ha trabajado en colaboración con la Facultad de Veterinaria y ha participado en diversos cursos para asegurar prácticas sostenibles y de primeros auxilios. El acceso al proyecto es a través del cuarto dinamo, una zona rica en flora y fauna endémica, lo que proporciona a los visitantes una experiencia única y educativa.
Desde su creación en 2018, Kalixtlauatl El Paraíso ha atraído a visitantes de todo el mundo, incluyendo Estados Unidos, Francia, Alemania, y Japón. La familia ha invertido en equipo profesional para garantizar la seguridad y comodidad de los visitantes. Entre los desafíos actuales, Víctor Fuentes menciona la implementación de prácticas de tiro con arco y la expansión de las rutas de senderismo.
El proyecto no solo ofrece una escapada tranquila de la vida urbana, sino que también desempeña un papel crucial en la preservación del último río vivo de la Ciudad de México, el río Magdalena. La familia Fuentes Soto planea continuar desarrollando El Paraíso durante los próximos diez años, con el objetivo de convertirlo en un modelo de ecoturismo y conservación ambiental.
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