Redacción: Daniela Martínez
Este mamífero de la familia de las comadrejas habita en el océano pacífico y se encuentra en casi todos los continentes, es una criatura marina que simpatiza al humano por sus peculiaridades en el agua. Son de los animales más sociales y juguetones con un promedio de vida de 8 a 10 años, aunque han estado a punto de ser declarados en peligro de extinción por la exportación de sus pieles en negocios de contrabandistas.
Las nutrias son unas expertas en la vida acuática, sus orejas y fosas nasales tienen la capacidad de evitar que entre el agua al cerrarse y sus patas y colas le ayudan a mantenerse a flote nadando de espalda. A pesar de contar en algunas partes de su cuerpo con más de un millón de pelos, no tienen una capa de grasa para mantenerse limpios, por lo que pueden observarse haciendo movimientos con los que parecen peinarse, lo que las ayuda a nadar mejor.
Estos roedores son animales que tienden a abrazarse, jugar en arroyos, ríos y saltando en la tierra. Además de demostrar su afecto con abrazos, para dormir entrelazan sus patas nutria con nutria para que la corriente no logre separarlas, de no ser así, también se enredan en algas y eso evita que salgan flotando. Son animales que parecen de peluche, cuentan con dos capas de pelo que les ayudan a regular la temperatura y soportar el frío del agua.
Este tipo de roedores llegan a arriesgar su vida cuando las nutrias son madres, ya que estudios demostraron que al amamantar a sus crías gastan demasiada energía, lo que pone en acción el instinto de supervivencia. A pesar de ser animales marinos, han ido urbanizándose, como es el caso de Singapur, donde estos mamíferos han modificado su comportamiento y son capaces de salir del agua y cruzar calles a la vista de todos. Uno de los animales más fieles que se mantiene unido a su pareja el mayor tiempo posible, es sin duda, de los más cariñosos y adorables.
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