El anuncio del presupuesto federal para 2024 ha encendido el debate nacional. A pesar de un incremento general en el gasto, áreas clave como el medio ambiente, ciencia y tecnología verán recortes significativos, a la vez que otras carteras disfrutan de sustanciales incrementos.
El gobierno federal ha destinado para ciencia, tecnología e innovación una suma de 148 mil millones de pesos, un pequeño fragmento de los más de 9 billones que planea gastar. Las prioridades parecen estar puestas en mega proyectos como el Tren Maya y el Tren Interocéanico, además de programas sociales.
El monto destinado a la ciencia, aunque representa el mayor aumento en el sexenio, sigue siendo un porcentaje magro del PIB mexicano, situándose en el 0.6%. Organismos internacionales sugieren un mínimo de 1.5%, especialmente considerando que México es la 15ª economía mundial y cuenta con una población de casi 130 millones.
México ha estado a la zaga en términos de desarrollo científico y tecnológico durante décadas. La pandemia de COVID-19 dejó al descubierto estas deficiencias, con el país incapaz de fabricar a tiempo su propia vacuna o construir ventiladores suficientes para la crisis.
En un movimiento sorprendente, el Congreso eliminó en 2023 la ley que obliga al Estado a invertir al menos el 1% del PIB en ciencia y tecnología. En su lugar, simplemente afirma que el gobierno tiene la «obligación de fomentar» la investigación, sin establecer un mínimo de inversión.
A nivel regional, México está siendo superado en inversión en ciencia y tecnología por países como Argentina, Bolivia y Chile, poniendo en riesgo su capacidad productiva a largo plazo.
Los analistas han señalado que, aunque el gobierno celebra un aumento del 15% en la ciencia y la tecnología, la inflación ha mordido ese aumento, dejándolo en realidad en un 7.5%.
Sin embargo, las Fuerzas Armadas de México, compuestas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Marina Armada de México, verán un importante aumento presupuestal, recibiendo más del doble de lo que se invierte en ciencia y tecnología. Esta decisión es justificada por la Secretaría de Hacienda, señalando que estas instituciones tienen la responsabilidad de concluir los proyectos ferroviarios del presidente López Obrador.
Otros movimientos polémicos incluyen un aumento del 200% para la Secretaría de Energía, llevándola a un total de 193 mil millones de pesos, mientras que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales sufrirá un recorte de 11.4%.
El secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, defendió el presupuesto, argumentando que se está llevando a cabo en un entorno de finanzas públicas saludables. También destacó que los programas sociales serán una prioridad, consolidando así el objetivo de construir un estado de bienestar.
El debate continúa mientras México determina sus prioridades fiscales y el impacto a largo plazo que estas decisiones podrían tener en el desarrollo y bienestar del país.
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