Rafael Carmona Paredes, coordinador del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), descartó que exista una crisis de agua a diferencia de otras regiones del país. Hizo mención de que la reducción de agua potable en algunas partes de la ciudad es una de las medidas preventivas ante la situación de sequía en el mundo.
Además, se especificó que actualmente hay un almacenamiento de agua en el Sistema Cutzamala de 46 por ciento. Se estima también, que para 2023 crezca dicho porcentaje, ya que, desde 2020 ha habido una disminución por la falta de lluvias, pero sin ser acumulativo, pues solamente de junio de 2021 a enero de 2022 se recibían 8 mil 200 litros por segundo, pero en febrero se incrementó a 8 mil 800 litros por segundo, y volvió a bajar en mayo a 8 mil 750 litros por segundo.
“Hemos tenido (tanto) aumentos como disminuciones en la cantidad de agua del Cutzamala, porque hemos establecido con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Comisión de Agua del Estado de México la estrategia para recibir más agua en los meses de estiaje que en los meses de lluvia. No han sido acumulativas las reducciones que se han tenido desde diciembre de 2020 hasta nuestros días”, dijo Carmona Paredes.
Explicó que la forma de trabajo actual son ciclos de operación, con el objetivo de garantizar el suministro a la población de la Ciudad de México y el Estado de México para la siguiente temporada de estiaje.
La estrategia es implementar 50 garzas para la recarga de 200 pipas, además, de las 630 que tienen para atender a 12 alcaldías y donde cerca de 300 mil habitantes están siendo afectados, pues son a estos a quienes se les realiza la disminución de suministro; haciendo un llamado a la ciudadanía para no utilizar agua potable para lavar automóviles o banquetas ni para regar plantas en esta temporada, sino que capten agua de lluvia para el riego.
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