UNESCO reconoce la Ruta Huichol a Huiricuta como Patrimonio Mundial
Redacción: Inés Arroyo
Tras más de dos décadas de esfuerzo y trabajo conjunto entre comunidades indígenas, organizaciones civiles y autoridades culturales, la “Ruta Huichol por los Sitios Sagrados a Huiricuta” fue inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Este reconocimiento marca un hecho histórico para los pueblos wixárika (huicholes) y para México, al ser el primer itinerario cultural indígena vivo de América Latina en obtener esta distinción.
La ruta comprende 20 polígonos distribuidos a lo largo de más de 500 kilómetros en cinco estados del país: Nayarit, Durango, Jalisco, Zacatecas y San Luis Potosí. Se trata de un camino ceremonial que los pueblos huicholes recorren anualmente para realizar ofrendas y rituales dedicados a sus deidades ancestrales, como parte de una tradición viva que fortalece su vínculo con la naturaleza y garantiza el bienestar colectivo.
La inscripción se logró durante la 47ª Sesión del Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO, celebrada en París. Con ello, el Estado Mexicano adquiere el compromiso internacional de proteger, conservar y garantizar la continuidad de esta ruta sagrada, tanto por su valor cultural como por su relevancia ecológica. El área total protegida abarca más de 649 mil hectáreas, que incluyen ecosistemas de gran biodiversidad.
El proyecto fue impulsado por la organización Conservación Humana A.C. y el Consejo Regional Wixárika, en coordinación con el INAH y con la participación directa de las comunidades originarias. Su objetivo fue claro: preservar un legado ancestral que trasciende generaciones y fronteras.
Aunque el reconocimiento otorga una protección internacional importante, los sitios sagrados aún enfrentan amenazas ambientales y sociales. Por ello, este logro también representa un llamado a la responsabilidad compartida entre autoridades, pueblos originarios y sociedad civil para resguardar uno de los patrimonios más significativos del país.
Este reconocimiento no sólo enaltece la espiritualidad y cultura del pueblo wixárika, sino que también nos recuerda que el respeto a la tierra y a las raíces puede construir un futuro más justo, diverso y consciente para todos.
¿Te gustó nuestra nota? ¡Contáctanos y deja tu comentario! AQUÍ
Conoce nuestra red ANCOP Network AQUÍ