Redactor: Sam Torne
El huracán Milton ha dejado su huella en los libros de récords meteorológicos tras convertirse en uno de los huracanes más potentes en la historia reciente del Atlántico. Con una intensificación explosiva, Milton pasó de ser una tormenta de categoría 1 a la peligrosa categoría 5 en cuestión de horas. Este crecimiento acelerado, en el que los vientos alcanzaron los 289 km/h, sorprendió a los meteorólogos y lo posicionó junto a huracanes históricos como Wilma en 2005 y Allen en 1980.
La intensificación de Milton ha sido un ejemplo claro de un fenómeno llamado «intensificación rápida», en el cual los vientos de una tormenta aumentan más de 56 km/h en menos de 24 horas. En el caso de Milton, este fenómeno se aceleró a una velocidad que prácticamente duplicó esa cifra, superando las expectativas de los expertos. Las aguas cálidas del Golfo de México y la baja cizalladura del viento crearon las condiciones ideales para este comportamiento atípico.
Phil Klotzbach, experto en huracanes, advirtió que Milton podría pasar por un ciclo de reemplazo de la pared del ojo, un proceso común en tormentas de gran magnitud, que debilita temporalmente la tormenta pero también puede expandir su tamaño, aumentando el área afectada. La tormenta, aunque ha sido degradada a categoría 4, continúa representando un grave peligro mientras se dirige hacia Florida, donde se espera que cause daños significativos tanto en la costa como tierra adentro.
Impacto que puede tener en la región
A pesar de no tocar tierra directamente en la península de Yucatán, los efectos del huracán Milton ya se sienten en los estados mexicanos de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, con lluvias torrenciales y fuertes vientos. Las autoridades locales han implementado medidas de emergencia, evacuando áreas vulnerables como la isla de Holbox y cerrando el acceso a diversas localidades para proteger a la población. También se han impuesto restricciones de movilidad y la ley seca en algunos municipios.
El gobierno mexicano ha confirmado que, aunque Milton se ha debilitado levemente, las lluvias y vientos provocados por la tormenta siguen generando condiciones peligrosas en varias partes del país. En Florida, donde se espera que Milton toque tierra en los próximos días, las autoridades han comenzado a prepararse para lo que podría ser una de las marejadas ciclónicas más destructivas en años.
El impacto potencial de Milton en Florida dependerá en gran medida de su trayectoria exacta. Si el huracán cambia ligeramente de curso, podría afectar de manera más directa a la costa oeste de Florida, particularmente en la bahía de Tampa, con consecuencias devastadoras. Las marejadas ciclónicas, que podrían elevar el nivel del agua en varias áreas, son una de las principales preocupaciones, además de las lluvias torrenciales que podrían provocar inundaciones severas, especialmente en áreas que ya han sido afectadas por tormentas recientes.
Aunque Milton ha comenzado a perder fuerza, el riesgo de un nuevo fortalecimiento sigue siendo alto, lo que mantiene a los residentes y autoridades en estado de alerta máxima mientras la tormenta avanza hacia el este.
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