La Ciudad de México es una de las más pobladas a nivel mundial y desafortunadamente también de las que mayor porcentaje de contaminación tiene, por lo que el aire ya es nocivo para la salud aun cuando los índices oficiales lo consideran aceptable.
Las condiciones geográficas, de vivienda e industriales que se tienen en la Ciudad de México han provocado que durante lo que va de este año, se han declarado en seis ocasiones contingencia ambiental; solamente la semana pasada el gobierno de la ciudad volvió a emitir el plan de actividades recomendadas por las altas concentraciones de ozono.
¿Cuáles son las consecuencias? Según la Universidad de Montana, en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), afirma que existe una relación entre la concentración de partículas ultrafinas con el desarrollo de Alzhéimer a temprana edad en habitantes de la ciudad. Gracias al estudio realizado, se demostró que los niños con exposición a aire contaminado presentan inflamación sistémica, cerebral e intratecal, entre otras afectaciones.
Si bien, la Ciudad de México se encuentra en una situación alarmante y no cumple con los niveles de contaminación “permitidos” por la Organización Mundial de la Salud (OMS), solamente el uno por ciento de las ciudades lo hace, mientras que en América Latina y el Caribe, existen lugares que no alcanzan, ni siquiera, los establecidos en 2005.
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