Cuatro formas para ahorrar energía eléctrica 

Redactor: Antonio Pulido   

Ahorrar energía debe ser un compromiso de todos los habitantes del planeta y tenerlo en cuenta en nuestra vida diaria. 

El pasado 21 de octubre se celebró el Día Mundial del Ahorro de Energía, una fecha que invita a reflexionar sobre el consumo energético y a promover el uso de energías renovables, que ayudan al cuidado del medio ambiente y generan ahorros económicos. 

¿Qué son las energías renovables?   

Las energías renovables son un tipo de energía que proviene de fuentes naturales y se reponen más rápido de lo que se consumen. Se encuentran en cualquier entorno, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Producir estas energías genera menos emisiones, por lo que todos los países han buscado, algunos sin éxito aún, transitar hacia las energías renovables, lo cual es una meta fundamental ante el cambio climático. 

La producción de energía mediante la quema de combustibles fósiles, como el carbón, el petróleo y el gas, libera una gran cantidad de gases de efecto invernadero (GEI). Estos combustibles son responsables de más del 75 % de las emisiones de GEI y cerca del 90 % de todas las emisiones de dióxido de carbono. 

Fuentes renovables   

Existen energías renovables que, en la actualidad, se presentan como la opción más asequible para la mayor parte del mundo, pues muchas de ellas comienzan a reducir sus costos. 

Energía solar: es la que se obtiene del sol en forma de radiación electromagnética. Es una energía renovable e inagotable, y se puede aprovechar de diferentes formas, como para generar electricidad o para producir calor. 

Energía eólica: se obtiene a partir de la fuerza del viento. Se puede generar mediante aerogeneradores, que transforman la energía cinética del viento en energía eléctrica. 

Energía geotérmica: este tipo de energía utiliza el calor del interior de la Tierra para obtener electricidad, agua caliente y calefacción, lo que la convierte en una gran alternativa de energía renovable. 

Energía hidroeléctrica: esta energía se genera al transformar la fuerza del agua en electricidad, a través de energía hidráulica, como los molinos hidráulicos que aprovechan la corriente de los ríos para generar energía.