Redacción: Inés Arroyo
Un equipo de 61 científicos de siete países realiza una expedición única a la Antártida con el objetivo de investigar el impacto del cambio climático. A bordo del rompehielos ruso *Akademik Tryoshnikov*, los investigadores navegan cerca de la costa del continente, recolectando muestras cruciales para entender mejor los efectos del calentamiento global en esta región.
La expedición, que comenzó el 23 de noviembre desde Rio Grande, Brasil, se centra en estudiar la capa de hielo de la Antártida, que juega un papel clave en el aumento del nivel del mar. Los científicos temen que, debido al calentamiento de la atmósfera y los océanos, esta capa pueda desestabilizarse de forma acelerada, lo que podría acelerar el aumento del nivel del mar de manera abrupta.
El equipo de investigación, compuesto por oceanógrafos, biólogos, químicos y otros expertos, navega a entre 500 metros y un kilómetro de los glaciares. Durante dos meses, recorrerán 20,000 kilómetros y realizarán investigaciones en 16 puntos de la Antártida. Utilizarán helicópteros para llegar a las zonas más remotas y recolectar muestras de hielo y sedimentos que ayudarán a reconstruir el clima de la región en el último siglo.
El glaciólogo brasileño Jefferson Simões, líder de la misión, destaca la importancia de la cooperación científica internacional. «La ciencia es clave para resolver problemas globales. La colaboración entre países es fundamental para abordar los desafíos del cambio climático», afirma Simões.
Además de sus investigaciones, el equipo utilizará satélites Starlink para enviar datos en tiempo real, superando las dificultades de comunicación que impone el entorno antártico.
La expedición tiene un impacto trascendental, ya que las regiones polares son cruciales para regular el clima global. Aunque la Antártida recibe menos atención que otras regiones como la Amazonia, su papel en la estabilidad climática es fundamental. Con esta misión, los científicos esperan obtener información vital para prever y mitigar los efectos del cambio climático en el futuro.
Este esfuerzo internacional, respaldado por la fundación suiza Albédo pour la Cryosphère, refleja la importancia de la colaboración científica para comprender y abordar los desafíos del cambio climático a nivel global.
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