En el mundo existen un sinfín de recursos, clasificados en dos enormes grupos –en realidad, uno más grande que el otro– renovables y no renovables, el agua es un claro ejemplo de no renovables, lo que significa que son limitados y no hay manera artificial de crearla, por otra parte, tenemos la energía que, aunque podría decirse que es renovable existen muchas maneras en las que afecta al planeta, sin embargo, en la actualidad contamos con varias opciones para crearla.
Una de ellas, son los paneles y calentadores solares, que además de aprovechar al máximo la energía natural del sol sin necesidad de explotarla –puesto que este tema es el principal factor que termina con los recursos no renovables: la sobreexplotación– pues de manera natural tenemos diariamente luz del sol, y que a través de la tecnología se han desarrollado mecanismos que crean que el calor de los rayos solares produzca energía.
Los paneles solares funcionan a través de la captación de luz y de calor, produciendo energía en grandes cantidades, además de que cumple un ciclo y es de autoconsumo, lo que significa que es un proyecto sostenible que por sí solo se renueva. Además, los paneles solares –por su composición– permiten que los rayos del sol atraviesen el material, pero limita el paso de los rayos ultravioleta que resultan ser dañinos.
Pero ¿por qué es una mejor opción? La energía que actualmente tenemos es producida por la quema de combustibles, principalmente como el petróleo o el diésel, que son altamente contaminantes, además de ser recursos no renovables y sumamente explotados por el ser humano.
Es por eso que una gran opción son los paneles solares y aunque aún es todo un tema la instalación y la manera en la que funcionan, no dejan de ser la siguiente primera opción para la industria energética de México y el mundo.
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