Redacción: Litzury Gamboa González
Un Tribunal Colegiado en Materia de Trabajo y Administrativa de Mérida ha dictado una suspensión definitiva a las obras del Tren Maya en los tramos 5 Norte (Cancún–Playa del Carmen), 5 Sur (Playa del Carmen–Tulum) y 7 (Escárcega–Chetumal), debido al incumplimiento de las normativas ambientales necesarias para garantizar un entorno sano en la región.
El fallo responde a un amparo presentado en Julio de 2020 por comunidades indígenas, campesinas, urbanas y costeras de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, junto con organizaciones de la sociedad civil, que denunciaron las afectaciones al medio ambiente causadas por el megaproyecto. El Tribunal sostuvo que las autoridades responsables no habían cumplido con los principios de prevención y precaución establecidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que resalta la prioridad de proteger la naturaleza ante cualquier duda.
En los tramos 5 Norte y 5 Sur, la decisión judicial subraya que, a pesar de contar con una manifestación de impacto ambiental y una evaluación autorizada, es necesario realizar estudios adicionales para cumplir con los principios de prevención. El Tribunal ordenó que se lleven a cabo estudios geológicos, geohidrológicos y geofísicos para asegurar que las obras no causen daños irreparables a los ecosistemas locales.
Por otro lado, en el tramo 7, el Tribunal identificó que la autorización de la manifestación de impacto ambiental fue otorgada con más de 12 condicionantes que aún no han sido cumplidas, entre ellas estudios y programas para la conservación del paisaje kárstico, así como medidas de rescate de flora y fauna. La falta de cumplimiento con estas condiciones también ha llevado a la suspensión de las obras en este tramo, hasta que las autoridades acrediten el cumplimiento de todos los requisitos establecidos.
El Tribunal basó su decisión en los lineamientos recientes de la SCJN, que enfatizan que las autorizaciones de impacto ambiental y cambio de uso de suelo no garantizan por sí solas un medio ambiente sano. Además, las organizaciones y comunidades locales reiteran su compromiso con la defensa de un medio ambiente sano y su rechazo al Tren Maya como un proyecto que, según ellos, atenta contra la naturaleza y sus derechos fundamentales.
Agregar comentario