El 21 de marzo, Greenpeace México, respaldado por más de 822 mil firmas de personas preocupadas por la contaminación plástica, se dirigió a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para entregar un documento en el que insta a México a mantener una posición sólida en las negociaciones mundiales para un Tratado Global de Plásticos. El objetivo es frenar la contaminación por plásticos y proteger los océanos.
La entrega del documento estuvo acompañada por una acción pacífica llevada a cabo por voluntarios de Greenpeace en las afueras de la SRE. Utilizaron una instalación simbólica con olas, tortugas marinas y un cofre del tesoro que representa las voces de cientos de miles de mexicanos preocupados por el medio ambiente. El mensaje claro era para la Secretaría de Relaciones Exteriores: «Es tu turno».
Esta acción tuvo lugar justo antes de la próxima reunión del Comité Intergubernamental de Negociación sobre la Contaminación por Plásticos (INC-4), que se llevará a cabo del 21 al 30 de abril en Ottawa, Canadá.
En el documento entregado a la SRE, Greenpeace instó a México a adoptar una posición firme en las negociaciones, exigiendo un Tratado Global de Plásticos lo suficientemente fuerte y vinculante para abordar las raíces de la contaminación plástica. Según Greenpeace y las principales comunidades científicas, es urgente garantizar una reducción significativa en la producción de plásticos de un solo uso a través de un tratado mundial vinculante.
El Tratado Global de Plásticos, cuya versión final se espera para fines de 2024, debe tener como objetivo una reducción global del 75% en la producción de plásticos para 2040, en comparación con los niveles de 2019. Esto se suma a la necesidad de considerar todo el ciclo de vida de los plásticos, desde la extracción de petróleo hasta su disposición final, para abordar los impactos ambientales y el cambio climático.
Ornela Garelli, campañista de Océanos Sin Plásticos de Greenpeace México, destacó la importancia de un tratado fuerte respaldado por la delegación mexicana de la SRE. Además, señaló la resistencia de la sociedad civil mexicana en la lucha contra la contaminación plástica, demostrada por las 822 mil firmas que respaldan la iniciativa de Greenpeace.
El llamado de Greenpeace no solo pide liderazgo a México en la protección de los océanos y la biodiversidad marina, sino también herramientas legislativas necesarias para frenar la producción de plásticos de un solo uso y otros residuos contaminantes. Se espera que la SRE tenga una participación destacada en la próxima reunión INC-4 y ponga en el centro de las decisiones las propuestas de la sociedad civil.
Greenpeace México continúa su campaña Océanos Sin Plásticos, recolectando al menos 200 mil firmas ciudadanas para respaldar una propuesta legislativa que reforme la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos. Para más información y participación, se puede visitar la página de greenpeace.mx.
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