Tras el paso del huracán «Lidia» el pasado 10 de octubre, Puerto Vallarta se enfrenta a importantes daños, especialmente en su entorno natural, con la caída de alrededor de mil 500 árboles.
Ante esta situación, la Subdirección de Ecología Municipal ha lanzado un programa para orientar a los ciudadanos sobre qué árboles plantar y ofrece la posibilidad de recibir hasta tres árboles por domicilio.
Según el último reporte de Protección Civil Municipal, las intensas ráfagas de viento del huracán «Lidia» derribaron aproximadamente mil 500 árboles, dejando áreas antes arboladas ahora desprovistas de vegetación. La responsabilidad de rehabilitar el arbolado del municipio recae en Servicios Públicos Municipales, mientras que Ecología Municipal, dirigida por Maritza Flores Sevilla, se encarga de actividades educativas ambientales.
Flores Sevilla destacó la coordinación con Parques y Jardines para realizar actividades de educación ambiental en áreas designadas, incluyendo camellones y zonas verdes. «Durante la temporada de lluvias, llevamos a cabo actividades de arborización, ya que en épocas de sequía, la supervivencia de los árboles es más baja», explicó.
La Subdirección de Ecología Municipal recibe constantes reportes sobre árboles que interfieren con tuberías y cables, por lo que promueve la plantación de especies que no causen tales problemas, como los ficus. Además, ofrece recomendaciones y certificaciones para garantizar el crecimiento saludable de los árboles plantados.
En cuanto a las recomendaciones de árboles, Flores Sevilla sugiere árboles frutales y forestales para hogares, y especies más grandes como parotas y ceibas para áreas ejidales. Los ciudadanos que deseen plantar árboles pueden recibir orientación en la Subdirección de Ecología, donde podrán elegir de uno a tres arbolitos según el espacio disponible, con la opción de plantarlos también en la vía pública.
El vivero de la dependencia cuenta con alrededor de mil 500 arbolitos listos para ser plantados en la próxima temporada de lluvias. Es importante mencionar que para podar o talar árboles en la vía pública o en terrenos privados, se requiere un permiso de la dependencia, y se establecen medidas obligatorias para compensar el daño causado mediante la plantación de otras especies.
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