El volcán Mauna Loa, está ubicado en Hawái y es considerado el más grande del mundo activo, y junto al Kohala, Hualalai así como el Kilahuea, formas dicha isla. Luego de 38 años, su período de tiempo más largo en calma entró en erupción hace unos días y derramó lava en Moku’āweoweo, así como en la cumbre del volcán y logró teñir el cielo de color negro azulado con unos tonos carmesí.
Hasta ahora las autoridades dicen que no presenta ser una amenaza para ningún grupo poblacional importante e incluso no se ha ordenado evacuar la zona, aun cuando el fenómeno está avanzando rápido y las erupciones anteriores han sido impredecibles.
La sismóloga de volcanes en la Universidad de Western Washington, Jackie Caplan-Auerbach, dijo que “Hay erupciones en Mauna Loa que terminan en un día. Otras duran mucho tiempo. La verdad es que en este momento no hay forma de saber qué pasará”. Aunque el volcán ha seguido un patrón ya conocido en él, sigue siendo estudiado por especialistas del Volcano Hazards Program del Servicio Geológico de EE. UU. (USGS).
Los investigadores dicen que de seguir fluyendo la lava desde la Zona de Fractura del Noreste durante un par de semanas y exista la posibilidad de que llegue al “Hilo”, se sabría con anticipación suficiente para la evacuación de la zona.
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